miércoles, 3 de septiembre de 2008

Trancas y Barrancas le pondrían un minibar a 'El hormiguero'

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Aunque madrugan mucho y trabajan casi 11 horas al día, Juan Ibáñez (Trancas) y Damián Molla (Barrancas) son capaces de encontrarle el lado positivo.

Tener a Pablo Motos como “jefe-colega” o divertirse dentro y fuera de las horas de trabajo son sólo algunas de las cosas positivas que Trancas y Barrancas encuentran a su trabajo en ‘El hormiguero’. “Sólo le falta un minibar”, asegura Juan Ibáñez, cuya mano da vida a Trancas.

El programa de Cuatro ha ampliado decorado, pero las hormigas están un poco resentidas porque la mesa (su ‘casa’) ha sido lo único que sigue igual. Eso sí, no se quejan. Damián Molla, que pone voz a Barrancas, sólo cambiaría las sillas. “Teníamos unas muy cómodas y nos las han quitado. Queremos unas de diez euros, pero cuesta encontrarlas”, dice.

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Ambos hacen terapia con las hormigas

Juan y Damián no sólo se divierten con Trancas y Barrancas, sino que también encuentran en ellas unas aliadas. “Hacemos terapia con las hormigas. Dicen todo lo que a nosotros no nos dejan decir”.

Damián aprecia a Barrancas. Tal vez por eso nunca la sometería a un experimento del científico Flipy. “Las hormigas prefieren ir a un spa. ¡Bastante tienen con quitarse las pelotillas que les salen!”, dice.

Cuando Juan se fue de vacaciones, dejó a Trancas “ligando en California, como siempre”. Y aunque Pablo Motos “no te deja en paz”, el actor pudo descansar para volver con las pilas recargadas.

Pablo Motos es para ellos un 'jefe guay'

Este verano, Pablo Motos se sometió a un entrenamiento de la revista ‘Men´s Health’ con el que ahora puede presumir de músculos. Por eso, Damián dice que “es guay tener a un amiguete de jefe, pero ahora nos da miedo porque nos puede pegar. ¡Es como si a los culturistas les salieran más dientes!”, bromea.


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